Domingo, 14 de diciembre

Toulouse, Diciembre de 2013

Desde estas líneas quiero manifestar mi profundo malestar hacia un género cinematográico que juzgo profundamente perjudicial para la educación, la felicidad y las esperanzas del ser humano: LA CIENCIA FICCIÓN, retratada fielmente en la película The Holiday.

No me cabe duda de que sabeis de cuál se trata, ya que se ha convertido en un clásico de la parrilla televisiva navideña junto a otros títulos cuya trama también se desarrolla en una dimensión paralela de paz, amor, felicidad e hidratos de carbono sin calorías. Véase Love Actually, o esa del millonario que paga a una familia pueblerina para poder pasar la navidad acompañado. No tengo ni ídea de como se llama pero Ben Affleck, escribiste El indomable Will Hunting, yo te respetaba.

En fin, es navidad, y en navidad HAY que creer en el amor, enfatizo ese HAY porque como no desprendas un aura de corazones rosas a tu alrededor eres una persona detestable. Peor aún que el Grinch, un mounstruo entrañable hasta que por culpa de una niña muy pesada acaba convertido en la versión grande y verde de un furby. 

Jim Carrey, da igual que te escondieras debajo de una mata de pelo fosforescente, digo yo, que va siendo hora de que frenes esa caída libre que comenzaste después de ese gran Show de Truman. Si el problema radica en la incapacidad para controlar la expresión facial la solución es fácil, que Nicole Kidman te preste algo de su bótox.

Pero volviendo al motivo principal de mi Hollywood-fobia, como soy completamente consciente de todo lo que he hecho este año y que intentar chantajear a Papá Noel sería inutil, suficiente si consigo evitar las represalias del karma, este año mi carta es para los guinistas de The Holiday:

Queridos consumidores habituales de algodón de azucar:

Después de disfrutar de su obra maestra, joya sin parangón del cine contemporaneo, me surgieron una serie de dudas existenciales incompatibles con mi descanso, por lo que ruego encarecidamente respondan las preguntas que les planteo a continuación:

1. ¿El emparejamiento de los actores principales fue al azar o fruto de la reflexión? 

Porque si de alguien nació la idea de agruparlos en función de su presumible clasificación en un concurso de belleza, me encantaría darle la enhorabuena.

No sabía como explicarle a mis primas adolescentes en plena formación de personalidad y confirmación de autoestima que si eres guapa, alta, delgada y rubia algún sucedaneo de Jude Law puede enamorarse de ti. Si eres buena persona y te gusta cuidar ancianos durante tus vacaciones de navidad en California, te quedas con Joe Black.

Moraleja: Mujeres del mundo, GIMNASIO, DIETA y TINTE PLATINO. No hay más.

2. ¿No creen que sería muy práctico poner algún tipo de advertencia al principio de la historia de amor Diaz-Law? 

Aunque sea en letra pequeña en un rincón de las escenas "Rodado por especialistas en plató con medidas de seguridad, no intenten reproducirlo en sus casas". Por lo menos a mí me habría ahorrado algún problema.

Hice el bachiller de ciencias, nos eneñaron en método científico mejor que el abecedario y, tras su película, lo puese en práctica.

1º Observar, chico aparece medio borracho en casa rural donde encuentra a chica deprimida con síndrome post-ruptura con la que pasar la noche. 80 minutos y tres tandas de anuncios después bailan frente a la chimenea vestidos de etiqueta al ritmo de un villancico de Mariah Carey.

2º Elaborar hipótesis, el amor a primera vista existe y funciona. 

3º Experimentación, en este caso reproducir las variables no fue difícil, soy universitaria.

4º Valorar resultados, no me convencieron. Repetí el experimento en sucesivas ocasiones hasta que fueron concluyentes, sigo soltera.

5º Enunciar una ley: QUEDA EMPÍRICAMENTE DEMOSTRADO QUE UNA RELACIÓN QUE COMIENZA CON SEXO NO ACABA MAL, NI SIQUIERA EMPIEZA. 

¡Adviertanlo! Es importante aclarar que el orden de los factores SÍ altera el producto.

3. ¿A qué tipo de chantaje sometieron ustedes a la varias veces nominada al Óscar Kate Winslet para que aceptara semejante papel?

Empieza enamorada de un imbécil que la utiliza mientras planea su boda con otra. Al borde del suicidio decide cruzar el Atlántico donde, tratando de recuperar su vida, se deja seducir por la única persona que conoce que no necesita una prótesis de cadera nueva, un galán encarnado por un actor famoso por protagonizar películas como School of rock... Qué recuerdos... Elegir entre la trama o el doblaje de Dani Martín en su época de Zapatillas sería muy parecido a decidir entre raparse al cero o afeitarse las cejas.

Pero lo más triste de historia de la gris Kate es que su "beso de felices para siempre" solo llega cuando al simpático Joe le pone los cuernos su novia pseudo-actriz y de afición anoréxica. 

¿En serio? ¿Un segundo plato? Esta mujer ha rodado escenas con Leonardo Dicaprio que empañaron los cristales de un Rolls Royce de los años 20. ¡Merece su respeto y admiración!

Gracias por su atención. No espero su respuesta, hace tiempo que dejé confiar en que me den explicaciones cuando necesito y merezco.

Y para despedirme de vosotros, un consejo. Si tanto cariño navideño te incomoda no te preocupes, después viene la primavera que la sangre altera y el amor de verano, tienes tiempo de practicar. 

Si fracasas siempre estarás a tiempo de unirte a mi equipo, el de aquellos que viven en un otoño continuo.