lunes, 23 de abril de 2012
25. lunes, 23 de Abril
No digas nada. No se por qué te crees en la obligación de decir cosas desagradables. Piensas que algo amargo, hiriente o brutal, por fuerza ha de ser vardadero. Pero las cosas no son así. Los milagros y lo cuentos de hadas no son un engaño sino una ilusión. Quizá el cielo también sea solo eso, una ilusión. Y aún así, nos ayuda a vivir. La verdad no puede ser una ilusión rota. Yo no te pido ninguna explicación, no te reprocho nada, no te exijo nada. Pero la esperanza no me la puedes quitar. No hoy, ni mañana, pero quizás algún día las cosas serán distintas. Entonces si no he cambiado, si sigo sintiendo lo mismo que siento ahora y tú me llamas, iré a donde tu digas y haré lo que tú quieras. Hasta ese momento, real o imaginario, sólo te pido un silencio cariñoso. Y que no se lo cuentes a nadie... ¿Prometido?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario